lunes, 18 de abril de 2011

INTERVENCIÓN SOCIOEDUCATIVA CON PERSONAS CON DISCAPACIDAD INTELECTUAL


En la clase del 6 de Abril, expusieron su trabajo unas compañeras que han tratado el tema de personas con discapacidad intelectual. Es un tema que me suscita mucho interés y con el que estoy muy sensibilizada, quizás por tener a un familiar con Síndrome de Down. Además, en la asignatura de trabajo social con minusválidos, también realicé un trabajo sobre este colectivo.

Durante esta exposición, las compañeras nos explicaron distintos tipos de discapacidad intelectual, mucha de ellas desconocidas para mí. Me llamó mucho la atención el síndrome de Asperger, ya que son personas muy inteligentes, que pueden llegar a memorizar una gran lista, por ejemplo de número de teléfono, pero tienen muchas limitaciones a la hora de entenderse con otras personas, porque cogen el sentido de la frase literal, sin apreciar si existe algún tipo de ironía o sarcasmo en ella. Soy una gran fans de la serie Big-Bag, donde uno de los protagonistas, sheldom, tiene este problema, y hasta que las compañeras no lo comentaron en uno de sus vídeos, ni siquiera me había parado a pensar en ello. Hablando de actores, algunos de mis compañeros (Israel, Jill, Elena, Rocío y Shaula) interpretaron distintos papeles en la exposición y lo hicieron muy bien, colaborando a que fuese muy amena e ilustrativa la exposición, desde luego si no tenéis éxito como educadores o trabajadores sociales (que lo dudo mucho), seguro que el mundo del espectáculo si tiene un hueco para vosotros.

Como señalé en la entrada dedicada a las personas con algún tipo de discapacidad visual, y en general creo que extiende a todas las personas que padecen algún tipo de discapacidad, tienen una dura lucha con la sociedad. Tienen que hacer frente en su vida diaria a numerosas barreras que se les pone, y como educadores sociales nuestra intervención también tiene que contemplar este aspecto, no podemos centrarnos en intervenir tan solo con el individuo y su familia, si no también con todo el entorno que rodean a estas personas, hay que normalizar su vida, y hacerle ver a la sociedad las necesidades que tiene este colectivo y ayudar a paliarlas para adaptarse a ellos y favorecer el mejor bienestar e integración de estas personas. Son víctimas de una falta de atención total, y a la sociedad en general lo único que le sale cuando ve a una persona con algún tipo de necesidad es sentir lástima o pena (yo también lo he pensado en ocasiones), y esto, lo que hace es cerrarles las puertas para que puedan fortalecer la autonomía y desarrollo personal. En una de las dinámicas se reflejo muy bien este aspecto, pues un compañero interpretó la llegada de un chico con discapacidad a un centro, donde no le permitieron apuntarse a un equipo de futbol porque se podía hacer daño, así que le sugirieron mejor apuntarse a unos talleres de pintura o algo “menos peligroso”. Esta dinámica me hizo reflexionar también porque se apuntó al factor de la familia. ¿Hasta que punto frenan su autonomía y desarrollo? ¡Es necesario educarlos a ellos también! Como educadores sociales hay que hacerles ver que la sobreprotección no es adecuada. Es muy común que los padres apunten a los hijos a colegios especiales dedicados a ello, cuando quizás esto no sea necesario y los menores pueden asistir a uno donde acuden chicos sin discapacidades, o también impiden realizar ciertas actividades por el miedo a que se hagan más daño o se burlen de ellos. En este aspecto, la presencia de un educador social en el colegio es fundamental para aconsejar a los profesores sobre las necesidades que puedan presentarse a los chavales y concienciar también a los menores

Por último, señalar la frase “la mayor discapacidad es no darse cuenta que somos todos iguales” porque me encantó y me pareció muy buena para que la sociedad pueda reflexionar sobre este colectivo y deje a un lado los estereotipos o prejuicios, abriendo las puertas a la integración de todas las personas.

domingo, 17 de abril de 2011

OCIO Y TIEMPO LIBRE EN LAS PERSONAS MAYORES


Este ha sido el tema de la exposición del pasado 30 de Marzo. Personalmente, no he descubierto nada que no supiera de este “mundo de las personas mayores”, pues como sabéis el trabajo que realicé con mi grupo trató el tema de este colectivo, aunque quizás desde una perspectiva “menos bonita”, ya que nos centramos en la soledad que sufren la mayoría de las personas mayores en hospitales y algunas residencias, especialmente aquellas que tienen gran dependencia.

La aplicación práctica del trabajo de las compañeras estuvo basada en dos residencias diferentes. Bajo mi punto de vista, una residencia no es una institución que está dedicada al ocio y tiempo libre para las personas mayores, aunque si sea una parte de su labor, sino a un cuidado integral de estas personas cuando sus familiares no quieren o no pueden hacerse cargo de ellos. Muchas de las actividades que se realizan en la residencia son manualidades o actividades que no llegan a motivar a las personas mayores, especialmente a aquellas que tienen autonomía personal, ya que han estado acostumbradas a más actividades en sus vidas y ahora no les interesa hacer flores de papeles o pintar un cuadro.

La temática del ocio y tiempo libre para las personas mayores puede dar mucho de si, ya que es un aspecto fundamental que debe trabajarse con el colectivo. Como educadores y trabajadores sociales, nosotros seremos los encargos de proporcionarle a las personas mayores esta alternativa, pues una de las mayores necesidades que tienen es la de relacionarse. De esta manera podemos prevenir que caigan en la soledad, con la correlativa depresión y pérdida de ganas por vivir. Es muy importante, volviendo un poco a lo anterior, tener en cuenta las necesidades e intereses de las personas mayores a la hora de ofrecérselas, y esto también en nuestro trabajo como profesionales.

El ocio debe ocupar un lugar importante en cualquier intervención con las personas mayores, porque si hay algo que tienen estas personas, es tiempo libre debido a la jubilación. Hay que plantearles alternativas, quitarles de la cabeza la idea de que con el final de su actividad laboral no pueden llevar a cabo una vida activa más allá de la ayuda a sus hijos y el cuidado de los nietos. La vejez es una etapa más de la vida, y como tal hay que aprovecharla como las anteriores.

Finalmente, señalar que el trabajo con este colectivo, a diferencia de otros, es muy gratificante, ya que simplemente escuchándolos (aunque simplemente asientas con la cabeza y no estés prestando mucha atención) les haces un poquito más feliz. A través del trabajo que he realizado en esta asignatura, he podido conocerlo mucho mejor, y de ser un colectivo con el que no me gustaba trabajar, ha pasado a ser uno de mis “favoritos”. Pienso que la sociedad no esta concienciada sobre la realidad de este colectivo, y hasta que no se llega a esa edad nadie piensa como se sienten estas personas, algo en lo que bajo mi opinión, también es importante cambiar como profesionales de la educación social.


sábado, 16 de abril de 2011

INTERVENCIÓN CON PERSONAS INVIDENTES


El 23 de Marzo la exposición que realizaron los compañeros abordó el tema de las personas con discapacidad visual. En el pasado cuatrimestre cursé la asignatura de trabajo social con minusválidos, pero no nos detuvimos en ningún colectivo específico, por lo que era un gran desconocido para mí y me suscitó mucho interés el conocer la variedad de enfermedades visuales que existen y las características específicas de cada de una de ellas.

Debo decir que me ha parecido una exposición muy buena, donde me han transmitido a través de las dinámicas muchas sensaciones que me han hecho reflexionar sobre la realidad que viven estas personas, y sin lugar a dudas, fortalecer la empatía hacia este colectivo, y su forma de enfrentarse a la sociedad día a día. El vídeo que mostraron del programa 21 días fue también muy revelador, pues se nos mostraron muchas de las complicaciones y barreras por las que estas personas tienen que atravesar y afrontar en su vida diaria.

Estamos ante un colectivo con muchos problemas de adaptación social debido a las numerosas barreras que le pone la sociedad, impidiendo de esta forma su integración en ella. Unas de las principales barreras son las arquitectónicas: semáforo sin sonido, informes no impresos en braile, falta de rampas, etc…creo que ante este problema hay detrás una gran falta de responsabilidad social, y es ahí donde debemos intervenir como educadores. Está claro que nuestra labor con las personas invidentes es importante, pues debemos apoyarles en su interacción con la sociedad, y proporcionarles las herramientas o recursos necesarios para ello, pero no debemos olvidarnos de que una parte fundamental de nuestra intervención se encuentra en la SOCIEDAD, no olvidemos que es ella quien debe adaptarse a las necesidades que surgen en estas personas. Nuestra labor de sensibilización y concienciación es muy importante, hay que tratar de paliar al máximo las desigualdades que puedan sufrir y que se fomente en la sociedad la empatía que se ha logrado en la clase a través de las dinámicas que han realizado los compañeros. ¿Es esto tan complicado? Yo espero que no, y que si cada uno pone su grano de arena podemos luchar para que todas las personas, tengan la dificultad que sea puedan ser un miembro más de la sociedad y todos, en igualdad de condiciones tengamos los mismos derechos.

Para finalizar me gustaría hacer referencia a la gran labor que realiza la ONCE (Organización Nacional de Ciegos y Españoles) con las personas con algún tipo de deficiencia visual. Su misión principal queda definida como “la facilitación y el apoyo, a través de estos servicios sociales especializados, de la autonomía personal y la plena integración educativa, social y laboral de las personas con ceguera y deficiencia visual”. Los servicios sociales especializados que ofrece la organización se organizan de acuerdo a las modalidades de: Servicios de atención personal, prestaciones, actividades colectivas, recursos materiales, y programas complementarios.

ABSENTISMO ESCOLAR


La exposición del pasado 16 de Marzo trató sobre el tema del absentismo escolar, uno de los principales problemas a los que vamos a hacer frente como educadores sociales si trabajamos en un instituto. Como nunca se sabe donde vamos a terminar, y dada la poca información que tengo sobre este tema, me resultó una exposición muy novedosa e interesante, y sobretodo en el que nuestra intervención como profesionales va a ser fundamental.

Las compañeras comenzando haciendo referencia a que la mayoría de las veces, los casos de absentismo aparecen en barrios marginales o con problemas de adaptación social, de hecho la aplicación práctica que realizaron estuvo basada en un colegio de polígono sur. Esto no quiere decir que no se de en otras zonas, que por supuesto que también se da, aunque quizás son distintas las motivaciones y causas que llevan a ellos. Una de las cosas más llamativa e interesante que he visto de la exposición ha sido la implicación que tienen distintos organismos del barrio, además de el colegio en tratar este problema, como es el caso de Radio ECCA o la asociación entre amigos.

Siempre he pensado que únicamente el colegio tiene una complicada lucha frente al absentismo escolar, aunque es a el, al que se le achaca la completa responsabilidad (y no niego que tenga la mayoría de ella). El colegio debe fomentar la comunicación entre la familia y la institución, hacer ver a la familia de los menores la necesidad que supone para ellos tener una adecuada educación y como favorecerá en su total socialización, y por otra parte trabajar también con los profesores para que motiven y apoyen a los niños con más dificultades educativas en lugar de ignorarlos porque no tienen el mismo nivel que el resto. Sin embargo, como decía antes otras agentes de la comunidad también tienen que colaborar e involucrarse frente a esta lucha, comenzando por las diferentes asociaciones que están en el, a través de las cuales se puede trabajar en fomentar el interés por la escuela y por lo que ocurre a su alrededor, concienciar de la importancia del colegio para el mayor bienestar futuro, realizar diferentes actividades extraescolares que pueden ser talleres de ayuda en el estudio para aquellos que vayan más atrasados, etc.

Quiero incidir en el trabajo con la familia porque las compañeras hicieron referencia a que permitir el absentismo escolar del menor, o directamente no escolarizarlo es un tipo de maltrato. La verdad que la palabra puede sonar muy fuerte, porque simplemente se ve como maltrato aquel físicamente visible o que deja secuelas psicológicas importantes, pero esto también lo es. Se trata de un maltrato hacia el menor porque se le está privando de un derecho, y además de que complete su socialización, descubriendo nuevos modelos de comportamiento, actitudes y valores fuera de los que conoce por su núcleo familiar. El menos debe experimentar distintas experiencias y actividades con niños de su edad y sus profesores, que como adultos también colaboran en su desarrollo.

Los padres, es muchas ocasiones no escolarizan a sus hijos porque no ven la importancia de hacerlo, ya que quizás ellos no la han recibido y les parece que no sirve para nada, que lo único que deben hacer los niños es trabajar para que comiencen a acostumbrarse a ello. Nuestra labor como educadores sociales está en hacerles ver a estos padres o familiares del menor su error, mostrarles la importancia de la educación, es decir, en intervenir con ellos para que posteriormente puedan mejorar el futuro de sus hijos que quizás, sin darse cuenta están destruyendo.

jueves, 14 de abril de 2011

VOLVIENDO ATRÁS


Hoy estaba viendo el telediario cuando escuchaba la noticia de que el alcalde de Madrid, Alberto Ruíz-Gallardón, ha lanzado la propuesta de crear una ley que OBLIGE a las personas sin hogar a pasar la noche en los alberges, incluso contra su voluntad. Menos mal que ya había comido porque si no estoy segura que se me hubiera atragantado la comida al escuchar esta barbaridad por parte de uno de los políticos de mayor popularidad en nuestro país y miembro del partido político de la oposición. Y todo esto tiene el objetivo de “proteger a los sin hogar de la indiferencia de la sociedad”, ¡pero que bonito te ha quedado!. Lo único que pienso que hay detrás de todo esto es un enorme desconocimiento de la realidad social, y un intento por invisibilizar la pobreza, en lugar de buscar otras medidas que favorezcan la integración.

Los alberges SI serían una medida adecuada cuando supusieran un recurso de calidad, si hubiera el suficiente número de ellos como para albergar a las numerosas personas que no tienen un techo, y donde poder recibir la atención médica, psicológica y de inserción socio-laboral que necesitan. Y de esto, es de lo que opino que se debe ocupar el señor Gallardón (y demás políticos), de proporcionar ese recurso de calidad a estas personas, y seguro que no sería necesario OBLIGAR a nadie a ir a uno de ellos.

Las personas sin hogar, o “sin techo” como también se les denomina es un colectivo del que desconozco bastante, pues pocas veces hemos hablado de ellos a lo largo de la carrera, pero con el que nuestro labor como educadores y trabajadores sociales es fundamental. Estas personas están en grave riesgo de exclusión social y es muy importante promover su la inserción social en la sociedad a través de distintos mecanismos. Nuestra intervención como futuro profesionales no está solamente con ellos, también con la sociedad, pues otras de las cosas que observaba impactada en las noticias era el gran apoyo que la sociedad mostraba hacia esta medida, por considerar que son un colectivo violento y que ensucia las calles. ¿Cómo pueden unas personas querer desentenderse de otras de esta forma?¿Qué clase de realidad están viviendo?. Por ello es muy importante la concienciación y sensibilización sobre este tema, mostrarle la realidad que viven esas personas, y que de cierta forma sientan empatía hacia ellas, o al menos no la traten como animales que viven en la calle.

sábado, 2 de abril de 2011

4ª CONFERENCIA: LOS ETF


El pasado 21 de Marzo tuvo lugar el último seminario de intervención dedicado a infancia y familia. En esta ocasión estuvo centrado en los equipos especializados de tratamiento familiar y la ponente fue Mª del Pilar Fuentes Pérez, trabajadora del ayuntamiento de Sevilla y que trabaja en el polígono sur.
En primer lugar se repitieron muchas de referencias hechas a lo largo de los anteriores seminarios como la preservación de la integridad de la familia, y evitar la separación de los menores del núcleo familiar a no ser que por la situación no haya otra alternativa.

Los equipos de de tratamiento familiar(ETF) ocupan una intervención de segundo nivel, es decir, los servicios sociales comunitarios (de primer nivel) son los encargados de detectar e intervenir en los casos a través de los programas que llevan a cabo, si se detecta que la situación se agrava o se necesita un tratamiento complementarios es cuando se hace necesaria la intervención de los ETF como los intermedios que intentan disminuir el riesgo del niño para que este pueda permanecer con su familia y no sea necesario el retiro de su entorno. Esta canalización a los ETF también pueden producirse en la práctica desde el servicio de protección de menores.
De esta primera parte se pueden deducir dos objetivos que se llevan a cabo como son:

-Evitar la separación de los menores
-Facilitar la reunificación familiar cuando los menores haya sido separados momentáneamente de su familia.

Al hablar de riesgo de los menores, se hablaron de distintos factores que pueden favorecer a la aparición de una situación que posteriormente se agrave y ponga en peligro la estabilidad de la familia, pero esto no quiere decir que por existir algunos de estos factores en los senos familiares la situación llegue a agravarse considerablemente, si no que estos factores si forman parte de algunas situaciones de riesgo considerables. Algunos de estos factores pueden ser:

-La discapacidad
-Problemas de salud mental
-Drogodependencia o alcoholismo
-Absentismo escolar reiterado
-aislamiento social sin existencia de redes de apoyo.

Actualmente también pueden favorecer a situaciones de riesgo los cambios que se han producido en las familias como el mayor número de separaciones y divorcios, la monomarentalidad o la violencia de género. Así como otros factores desencadenados de la situación socio-económica actual con la que ha aumentado el paro, en muchos casos se ha reducido la remuneración y por lo tanto, las capacidades adquisitivas de la familia.

Entrando en el terreno profesional, estas situaciones de riesgos están tratadas por un equipo interdisciplinar polivalente (de nuevo en esta conferencia se hace hincapié a ellos): trabajador social, educador social y psicólogo, que desempeñan diferentes tareas orientada principalmente a los siguientes campos:
•Salud:Se realiza un seguimiento de las necesidades sanitarias, educación para la salud (drogodependencias, alcoholismo, etc).
•Escuela:coordinación con el profesorado, potenciación de la relación familia-escuela, reducción del absentismo, etc.
•En casa:establecimiento pautas educativas mediante la implatación de normas y límites, dar a conocer el desarrollo evolutivo de los menores, etc.
•Orientación formativo-laboral:elaboración de un proyecto de vida por parte de los adolescentes, trabajar sobre hobbies, inquietudes, etc y la coordinación con recursos formativos-laborales de la zona.
•Ocio y tiempo libre:darle a conocer los diferentes modos de ocio y tiempo libre que se ofrecen en la zona y un mejor aprovechamiento de este en familia.

En todo este trabajo, la figura del educador y trabajador social es muy importante, y es una de las cosas de las que he reflexionado a raíz de este seminario. Como he dicho en numerosas ocasiones en este blog, el trabajo con menores es algo que me encanta y el día de mañana, cuando sea profesional me gustaría dedicarme a ello. En estos seminarios he conocido la parte más dura de este ámbito, algo que creo que me ha servido para salir a trabajar con una idea más cercana a la realidad y más clara sobre aquello que me voy a encontrar, y a dejar del lado esa “idealizada idea” de que el trabajo con menores es un camino de rosas.

3º CONFERENCIA: INTERVENCIÓN DESDE LOS SERVICIOS SOCIALES CON INFANCIA Y FAMILIA


El tercer seminario de la asignatura de Intervención tuvo lugar el 21 de Febrero. Las ponentes fueron María del Mar Reina Cabanillas y Teresa de Jesús Fernández Arqueros, trabajadora social y psicólogas respectivamente del Ayuntamiento de Camas. La temática tratada fue la intervención desde los Servicios Sociales Comunitarios en infancia y familia.

La verdad que los servicios sociales comunitarios nunca han sido de mi interés, siempre me ha parecido que se intenta tratar tanta cantidad de cosas, atender a tantos colectivo que finalmente no hacen nada. Por esta razón, en un primer momento no tenía interés en el tema que se iba a tratar e iba con poca predisposición.
En primer lugar, comenzaban la exposición haciendo referencia a las cuatro prestaciones generales que prestan los Servicios Sociales comunitarios (SIVO, SAD, COSO, CORE), los cuales ya conocíamos porque se han tratado en el temario de asignaturas anteriores como servicios sociales.

-SIVO(Servicio de Información, Valoración y Orientación): Se ocupan, por un lado, de proporcionar toda la información de los recursos existentes que desde los Servicios Sociales se presta a todos los ciudadanos y a los cuáles tienen la posibilidad y derecho de acceder. Por otro lado, este servicio también se ocupa de detectar y analizar los problemas sociales y, en su caso, de realizar la posterior derivación a otro organismo.
-SAD(Servicio de Ayuda a Domicilio): desde este servicio se dan prestaciones de carácter doméstico, social y de apoyo personal a individuos y/o familias que faciliten el desarrollo de su autonomía personal en su medio habitual.
-COSO(Servicio de Cooperación Social): éste se encarga de la promover y potenciar la vida en comunidad a través del fomento del asociacionismo.
-CORE(Servicio de Convivencia y Reinserción): que tendrá como función la búsqueda de alternativas al internamiento en instituciones de las personas que se encuentran en especiales condiciones.

La intervención familiar se lleva a cabo desde el servicio del CORE, a través de programas de Atención a Familia e Infancia en el cual participan distintos profesionales del ámbito de lo social: Trabajadores Sociales, Psicólogos y Educadores Sociales. Este equipo interdisciplinar de profesionales (del que tanto hemos oído hablar en nuestra carrera) se denominaba PAFI.
Ante las situaciones de riesgo, los servicios sociales comunitarios son los primeros en intervenir, y en su caso, derivar. Los principales motivos que propician la intervención son:

Individuales: En relación a los padres puede producirse alteraciones conductuales debido entre otros factores al bajo nivel educativo, minusvalía física, toxicomanía, delincuencia, mendicidad, etc. En relación a los hijos trastornos de personalidad, trastornos de conducta, problemática de adaptación, delincuencia juvenil,…
•Familiares: Se pueden producir variaciones en la estructura familiar como separación o divorcio, ausencia de uno o ambos padres (por abandono o muerte), monoparentalidad, etc. Otros factores son la conflictividad en las relaciones familiares por problemas de comunicación o pon problemática de violencia y maltrato.
Socio-ambientales: son aquellas situaciones que pueden derivar por causas laborales como desempleo, carencias económicas, etc. Por la Vivienda como el hacinamiento, carencia de vivienda en propiedad, inhabitabilidad de la misma. O por la escolarización (absentismo escolar, fracaso escolar...)

Tras esta parte un tanto aburrida, que sirvió más que nada de recordatorio, se pasó a una parte más práctica y bajo mi punto de vista más interesante, en la que las ponentes nos relataron distintas experiencias y nos dieron consejos que sin duda, nos acercaron más a la realidad de este colectivo y vamos a poder mejorar nuestros conocimientos a la hora de intervenir. Algunos de los principios fundamentales que se señalaron a la hora de intervenir con el menor fueron: la normalización de la vida del menor, tener en cuenta la opinión de este en todo momento, posibilitar que siga conviviendo en su entorno siempre que sea posible y conocer de forma global todo aquello que rodea a los sujetos de nuestra intervención. En esta parte nos hablaron de la necesidad de la experiencia, así como la de formarnos continuamente. En cierto modo, lo de la experiencia te hace coger más confianza contigo misma, porque al salir de la carrera se tiene miedo a no saber si se va a estar preparada para la intervención o si esta intervención va a ser la adecuada. En este sentido esto me tranquiliza porque se ve como algo “normal” esta inquietud y que con la experiencia se irá solventando. También nos ayudará a saber mirar más allá de las necesidades explícitas que se nos dice y a trabajar mejor sobre las causas fundamentales del problema.

Una de las ideas y críticas con las que llegaba a la conferencia es la poca prevención que se hace desde los estos, y después de la charla he salido con la misma impresión, pues no se nos ha hablado en ningún momento de ello y es algo que creo fundamental a la hora de trabajar con cualquier colectivo, y especialmente familia e infancia.

Otros de los graves problemas que creo que existe en los servicios sociales comunitarios es la gran burocratización que en ellos hay, ya que dificulta la comunicación y coordinación de los distintos sistemas de protección, y la falta de recursos cuando estos sean necesarios. Por otra parte también me dio la sensación de que se trataban todos los temas por igual, y que con el paso del tiempo el trabajo se va reduciendo, algo que creo que es un grave error. Si algo sé de ante mano de mi futuro trabajo, es que con ciertos colectivos vamos a llegar a saturarnos y a “quemarnos bastante”, y sin duda esta es una gran lucha con nosotros mismos que vamos a tener que llevar a lo largo de nuestra vida profesional, para evitar que esto afecte a nuestros usuarios y nuestra intervención con ellos no sea la adecuada por ciertos estereotipos previos que se tengan de casos anteriores similares.